El Hinneni Trail Running Jumilla estuvo presente en la ultra trail “Cavalls de Vent”

El punto de partida de la ultra trail “Cavalls de Vent” es la pequeña localidad de Baga y se desarrolla por el Parque Natural del Cadi-Moixero, en el Pre-Pirineo catalán.

Este ultra trail es uno de los más reconocidos de nuestro país, que junto a la “Transvulcania” constituyen el circuito “Salomon Nature Trails”, dos ultramaratones con carácter internacional, con más de 1.000 inscripciones realizadas por sorteo y la presencia de los mejores corredores de trail del mundo.

La “Cavalls de Vent” se desarrolla en un entorno impresionante y un ambiente genial y en este contexto se encontraron cuatro jumillanos el pasado sábado, 21 de septiembre, a las 07:00 en la línea de salida. Los cuatro participantes del “Hinneni Trail Running Jumilla” estaban cargados de mucha ilusión y ganas, con horas y horas de entrenamiento a sus espaldas.

Ya bien entrada la noche, cada uno a su ritmo y a la luz de los frontales, los cuatro fueron llegando a Baga tras recorrer una distancia de casi dos maratones y media, es decir, 100 kilómetros, por montaña con un desnivel positivo de 6.668 metros y un total de unos 13.270 metros.

Los cuatro jumillanos “Finisher”, es decir, que finalizaron la prueba, de la “Cavalls de Vent 2013” fueron: Juan Palao, que entró el 135º de la general en  16h 39min y 59seg; Gumer Esteve y Manuel Esteve, que entraron en los puestos 218º y 219º, con un tiempo de 18h 06min 53seg y Martín Navarro, el 326º en 19h 56min 59seg, de 626. Estos cuatro corredores del “Hinneni Trail Running Jumilla” consiguieron cruzar la línea de meta en una prueba que superaba las 1.000 inscripciones, lo que significa una grandísima actuación de este joven equipo de trail de nuestra localidad y, por encima de todo, una enorme y brutal prueba de superación personal.

Es de destacar que un ultramaratón es una prueba extrema de ultrafondo en la cual el hecho de cruzar la línea de meta ya se considera un gran triunfo, debido al alto porcentaje de abandonos. De hecho, en esta edición hubo cerca de un 40% de abandonos por agotamiento, deshidratación, lesiones y tiempos de corte, siendo a su vez  una de las ediciones con mayor número de corredores “finisher” en meta.

El último corredor llegó sobre las 11 de la mañana del domingo entre los aplausos del público, habiendo tardado cerca de 29 horas en realizar la prueba, el tiempo máximo permitido para ello.