La Foto de la Semana XVIII

«Cabras en Jumilla»

Entre los recuerdos que perduran de mi infancia, mantengo fresca en la memoria la imagen de los ganados de cabras por las calles de Jumilla saliendo hacia el campo de mañana temprano y regresando a la ciudad al atardecer. Era una imagen cotidiana que se sucedía cada día y que iba acompañada del sonido de algún cencerro y el rastro que dejaban los animales a su paso sobre las calles. Rastro que apenas duraba unas horas pues alguna vecina que les tenía cogida las horas de sus idas y venidas, aprovechaba para barrer y estercolar sus macetas.

De aquel trasiego diario recuerdo que de trecho en trecho, alguien salía a la puerta de su casa para que, in situ, el cabrero le ordeñaba en aquel cacharro de aluminio o porcelana un litro o litro y medio de leche.

Hoy nuestros ganados de cabras murciano-granadinas están estabulados, apenas si salen a deambular por los barbechos y rastrojeras. Ya no se aprovecha el pámpano de las viñas y muy pocos ganaderos atan y secan en la escarda de los olivos las ramas taladas, pues sus piensos proceden de preparados específicos ya elaborados por la industria ganadera o preparados por las propias explotaciones ganaderas a base de cereales (cebada, avena, sorgo, soja…), semillas de algodón y residuos de la industria alimentaria (con frecuencia cáscara de naranja) y forrajes secos. Esta alimentación perfectamente calculada aumenta la producción en leche con las ganaderías estabuladas, lo que elimina la necesidad de sacar a los animales al campo. De ahí que de sacar los ganados un rato se hace simplemente para que estiren las patas y desgasten las pezuñas o, simplemente, les de un poco el aire y el sol.

Salvo estos breves paseos es muy infrecuente ver las cabras pastoreando al aire libre.  La imagen de esta semana, tomada al atardecer en el paraje del Portichuelo, corresponde a uno de esos instantes en los que este ganado salía al campo para, además de airearse, comer algo de forraje fresco. Una imagen cada vez más infrecuente por las razones que explicamos

Fuente: http://www.rendrijero.com