Anoche tuvo lugar una nueva explosión de violencia con una pelea en la que los participantes llegaron a intentar agredir a sanitarios, indican fuentes cercanas al caso. La localidad quedó conmocionada por el crimen de Kevin y, a raíz de esta muerte, comenzaron los incidentes de fuego y destrucción en el municipio.

Vecinos la tomaron primero con los policías, a los que culpaban de no haber hecho nada para evitar el fallecimiento del joven, acuchillado presuntamente por el ex de su actual novia, un chico que se llama Inocente y que está en prisión provisional. 

La riña de anoche, en la que estuvieron implicadas decenas de personas, arrancaba pasada la medianoche en un bar de la calle Colón con Antonio Machado. En esta reyerta precisaron de asistencia sanitaria dos jóvenes, de 18 y 23 años, que son hermanos, y que fueron atendidos in situ, porque se negaron a ser trasladados a un hospital, pese a que presentaban múltiples golpes.

Un cuarto de hora después, el 112 recibía una llamada en el que se alertaba de que un grupo de personas se encontraba aporreando la base del 061 en la localidad, tratando de acceder y de agredir a los sanitarios que tienen ahí su base.

Según apunta ‘la opinión’, fuentes cercanas al caso apuntaron que los nuevos disturbios guardan relación con el crimen de Kevin y la posterior detención y puesta en libertad de los jóvenes que ya incendiaron Jumilla días después del acuchillamiento mortal.